Estaba sentado a la orilla de aquella enorme e inmensa montaña rusa en los estudios universales en orlando florida, miraba lo majestuoso de aquella estructura, llena de curvas y de torres con una inigualable elegancia y belleza, siempre desde niño me atrajeron este tipo de maravillas mecánicas y entonces recordé como de niño perdía el tiempo observando como la suave brisa del viento movía en un eterno va y ven las mas delgadas  ramas y delicadas hojas de los arboles y como a pesar de lo fuerte que pudiera llegar a soplar el viento una telaraña jamas sucumbía a la tempestad a su alrededor, y un buen día cuando el viento arremetía contra la casa en la que viva de niño me asome por la ventana por que el zumbido del aire me intrigo asi que fui  hacia la ventana de la sala y ahí me quede perplejo observando como la rama de un árbol luchaba por no desprenderse, estuve ahí parado en la ventana por espacio de una hora inmerso en esa batalla de la naturaleza contra las inclemencias del mal tiempo, mientras yo estaba en la ventana mi abuela se acerco a mi y me dijo que haces en la ventana y que observas con tanto afán, y yo le conteste, ¿por que a pesar de tanto aire abuela esas ramas tan delgadas no son arrancadas del árbol?, ella sonrió y un poco asombrada me dijo mira hijo las ramas de un árbol suelen aguantar todo pero no es por que ellas sean indestructibles ni mucho menos, es por que no son solo ramas son seres vivientes como tu y como yo y aparte no están solas en esa batalla ellas forman parte de algo mas grande llamado árbol que en conjunto las ramas las hojas el tronco y lo mas importante las sabia que corre por sus venas forman un todo y son una de las estructuras mas fuertes que la naturaleza pudo haber creado, de regreso mi mente en  orlando al recordar esa charla en particular que tuve con mi abuela y observando aquella maquina inmensa e imponente, pude comprender por que a pesar de que en la vida habia pasado por tormentas,calamidades y desgracias jamas nada había logrado destruirme que así como las ramas eran parte de un todo yo también era parte de un todo y como la rama yo estaba aferrado a un tronco que era mi madre y que como la rama yo tenia hojas que eran mis hijos y que como el árbol entero en el cual fluía sabia por sus venas también en mi interior fluía la grandeza de dios y que el me había acompañado a lo largo de ese calvario que fue mi vida hasta ese entonces y que por eso jamas había sido arrancado del árbol, en ese momento me levante respire hondo y me dirigí hacia la montaña rusa a degustar un poco de adrenalina......................

MASADE